“Un Galán muy Criminal”

Por: Darinel Zacarías

Hay funcionarios públicos que dan lástima por el pobre acervo cultural que poseen, mientras otros dan vergüenza por ser tan torpes e ingenuos ante problemas que requieren seriedad. A nadie extraña que en esta ocasión un “político farandulero” se haya mofado nuevamente de la justicia, amparado por un manto de impunidad “El Tira Bala” mote que distingue al edil de Huehuetán Renán Galán. Este alcalde de pacotilla es la mejor muestra de que la ilegalidad con la política no da buenos resultados.

Era de esperarse que un seudo político que fue sacado de una pandilla delictiva cometiera exabruptos que dañaron la integridad física y moral de 19 jornaleros y sus respectivas familias. Renán Galán considerado como un servidor delictivo, vándalo, corrupto, atentará contra la buena política del gobernador Sabines.

Los 19 jóvenes detenidos por la PGR, acusados de encabezar una banda de *Roba Rieles*, fueron el resultado de los abusos de Renán Galán, ellos solo fueron contratados por una empresa hasta hoy fantasma que manejaba este. Si bien es cierto las condiciones de la crisis en el país obligan a los que menos quieren a emplearse por necesidad en trabajos temporales, ellos solo fueron víctimas de un alcalde represor, ambicioso y corrompido.

Renán Galán Gómez, utilizó a los 19 jóvenes para limpiar la orilla de las vías férreas y sacar rieles para supuestamente ser vendidos en forma ilícita, sin pensar que su negocio de jugosas ganancias fuera irrumpido por las autoridades judiciales, donde él como Pilatos se quiso lavar las manos, en este juego también se contó con el solapamiento y participación de su conyugue, quien también comparten mutuos genes de impunidad y vandalismo crónico.

Los detenidos fueron contratados por gente del ayuntamiento, además en su declaración ministerial coincidieron en revelar que para transportarlos al lugar del trabajo se utilizaban patrullas de Seguridad Pública Municipal (SPM) y las tareas eran supervisadas por el mismo alcalde Tira Bala.

Renán Galán, ya ha estado involucrado en actos criminales, como aquel donde hirió con arma de fuego al joven Julio César Orellana Marroquín, esto con alevosía, ventaja y cobardía, en los momentos en los que se encontraba bajo los influjos del alcohol.

Nadie sabe “a qué le tira” la primera autoridad de ese municipio, quien se presentaba como: “el futuro diputado”. Y hoy como el traidor e Iscariote de los electoreros, que lo ven como una rapiña y un roedor de colas larga y retorcida.

En este manto de impunidad, se encuentra tejido por las manos de Oscar Salinas Morga “El Matoncito”, la Mofletuda del priato Arely Madrid Tovilla y el narco político Cesar Amín González, quienes forman la camarilla de bandidos del tricolor y quienes amenazan con apadrinar a “suspirantes” a sillas municipales para seguir bajo el amparo de la ilegalidad, la injusticia y seguir cometiendo atropellos contra los chiapanecos.

A esto se le agrega que hace poco, este alcalde viendo al tempestad no se incaba y resulta que la unión de tablajeros de la CTM de aquel lugar, denunciaron una serie de anomalías orquestadas por el edil, esto con fines mezquinos.

Los tablajeros dijeron estar molestos porque la actual administración a propiciado que grandes empresarios y gente apoderada, sin motivo alguno de investigación de mercado, proveniente de diferentes partes del estado, han llegado a Huehuetán a establecer negocios que están terminando con los locales de quienes habitan ese municipio.

Tal es el caso de una empresa de reciente creación propiedad del priista chiapaneco Oscar Alvarado, quien solapado por el edil Tira Bala, ha empezado a bajas los costos por kilogramo de carne e insumos de primera necesidad, esto ocasionando un declive en las ventas de los negocios establecidos por años.

Por si fuera poco, Oscar Alvarado ha echado a andar un rastro en aquel municipio que no cuenta con las condiciones de salud necesarias, sin que se le realicen las revisiones pertinentes, trabajando de manera impune y descarada.

Renán Galán, es conocido en sus dos años de administración por involucrarse en problemas con la ley, acusado de entorpecer el desarrollo de Huehuetán, su nepotismo y su enfermizo poder han sido factores que han marcado a su municipio como ingobernable, un pueblo sin ley, sin cambios ni trabajos de impacto social. Lo anunciado, lo difundido solo son shows montados, orquestados, maquillados que ciegan la realidad de un municipio que a sufrido de haberle dado poder a un cateto seudo-politico que sin visión ni capacidad hundió a Huehuetán.

Es una lástima que este político represente al pueblo de Huehuetán y utilice su cargo para enriquecerse ilícitamente, impunemente e insaciablemente.

De cualquier forma, es evidente que el sistema político chiapaneco ha permitido la proliferación de personajes que en nada contribuyen al desarrollo de la nación y, por el contrario dejan mucho qué desear con sus comentarios, escenas y peleas. Desde Jorge Kawashi, Pancho Cachondo, Félix Salgado Macedonio, Ariel Gómez y ahora este “alcaldecito”, son la “nueva generación del cambio en México” que apuesta por convertir la política en un escenario grotesco, chistoso, como si los problemas del país se solucionaran haciendo reír a la gente o burlándose de la tragedia humana.

La equivocación en la actuación del Tira Bala es desafortunada, penosa y atenta a la ética y a la moral pública, reflejando poca educación y un lamentable cinismo por creer que puede hacer y deshacer lo que se le antoje sin ningún compromiso con los pocos que votaron por él.

Creo que Renán Galán enfrenta el dilema más importante de su “aventura” - *no carrera* política, porque un verdadero representante popular no se escuda en la impunidad, creyendo que con eso le está cumpliendo a los electorales.

Si él tuviera un poco de vergüenza, no solo se retirara a tiempo, antes que lo manden guardar al Amate, si no que también firmaría la sentencia de su propio ostracismo político, porque hoy Chiapas reclama políticos más comprometidos. Es una tristeza que existan este tipo de injertos humanos…con la cara de vergüenza y la conciencia abierta a la crítica…mi más sincero pésame a los habitantes de Huehuétan. ¡Qué mal plan!