HOY EN SU COLUMNA SEMÁFORO
Autor: EnSUMA »9:20:00 p.m. »Sin comentarios
Genocidas. Jurisdicción Sanitaria VII.
Verde. El pasado sábado 24 de julio, el Gobernador del Estado, Juan Sabines Guerrero, acompañado por el Secretario de Salud estatal, James Gómez Montes; Rosalinda Orozco, sub secretaria de gobierno; Percy Damián Corzo, Administrador del Aeropuerto Internacional de Tapachula; el cónsul de El Salvador, Nelson Miguel Cueller Hernández, autoridades de salud de la República de Guatemala y los presidentes municipales de Cacahotan, Huixtla, Villa Comaltitlan, Tapachula, entre otros, así como funcionarios de distintas secretarias del Estado; dio el banderazo del “Operativo de Reforzamiento del Programa contra el Dengue en Tapachula”.
Amarillo. El origen del Programa IMSS-Oportunidades se inicio en 1973 con la modificación de la Ley del Seguro Social y se faculta al IMSS para extender su acción a núcleos de población sin capacidad contributiva, de extrema pobreza y profunda marginación.
En 1977, se crea Coplamar. En 1979, el IMSS integra sus servicios a Coplamar, por lo que surge el Programa IMSS-Coplamar. En 1989, se amplió IMSS-Coplamar y cambió su nombre por el de IMSS-Solidaridad. En 1995, Ernesto Zedillo, Presidente de México, encargo el diseño de un plan para atender la pobreza al economista Santiago Levy y el demógrafo José Gómez de León.
Ambos crearon lo que se ha considerado uno de los programas más exitosos para aliviar la pobreza. Levy es hoy director general del IMSS. Gómez de León, falleció en el año 2000. En 1997 se crea el Programa Nacional de Educación, Salud y Alimentación (PROGRESA). El 6 de marzo de 2002, se renombró al PROGRESA como Programa Desarrollo Humano Oportunidades (PDHO). Por lo que cambio de nombre por IMSS-Oportunidades, siendo el Modelo de Atención Integral a la Salud (MAIS) el pilar fundamental del programa. Rojo. Paradójicamente. Andrés Gerardo Espinoza, jefe de la Jurisdicción Sanitaria VII-Tapachula, con la complacencia de James Gómez Montes, Secretario de Salud en el estado, los dos dicen gozar de los favores del gobernador por lo que no les pueden hacer nada y por eso actúan arbitraria e inhumanamente como lo hicieron este sábado; utilizando el MAIS, como uno de los principales alimentos de los mexicanos y de los animales.
Por instrucciones de estos dos funcionarios, personal medico y de enfermería, obligaron bajo amenaza de ponerles “falta” a las beneficiadas con el “Programa Oportunidades” si no se presentaban a las 8 de la mañana en el Centro de Salud Urbano ubicado en la 8ª. Avenida norte y 19ª. Calle oriente, colonia 5 de febrero. Una inasistencia, para las madres solteras, con hijos pequeños y viviendo en una precaria economía; significa un descuento de la mitad de lo que reciben como apoyo. Algunas de las mujeres no asistieron a su trabajo. Llevaron a sus pequeños hijos, sin desayunar. Dos horas después llegaron los autobuses para trasladarlos al aeropuerto, lugar en que se llevaría acabo el banderazo del “Reforzamiento del Programa contra el Dengue en Tapachula”.
Varias cajas de refrescos y paquetes con botellas de agua, permanecían resguardadas por el personal de la jurisdicción, sin ser repartidas, esperando la orden del “patrocinador”, según respuesta de una de las personas que resguardaban los productos. Uno de los organizadores, Silvio González López, medico de profesión y con mucha “experiencia”, tema aparte, se pavoneaba de un lugar a otro mientras bebía y comía de los sándwiches, que eran para la gente que ellos obligaron a asistir. Para las 2 de la tarde, el calor, el hambre, la sed y el cansancio se apodero de los asistentes. Varios fueron atendidos de urgencia por médicos ahí presentes. Hasta entonces, los organizadores Andrés Gerardo Espinoza y James Gómez Montes, giraron instrucciones para que se empezaran a repartir el agua y los sándwiches, los cuales no alcanzaron a las más de 500 gentes.
La gente se desespero y al quererse retirar, se los impidieron, nuevamente amenazándolos con ponerles falta. Como cárceles de alta seguridad y una forma de amedrentar a la gente, pasaron lista de asistencia. Al finalizar el evento, 4 de la tarde, más de 100 personas tuvieron que pagar 15 pesos de su pasaje para Tapachula, por que los de la jurisdicción no se preocuparon por regresarlos, sin impórtales que fueran niños.
Reflexión. Los niños no tenían obligación de estar en dicho evento y menos pasar por toda esta odisea. ¿“Profesionales de la medicina” y encargados de un programa de salud? lo que menos les importa es la salud de quien gracias a ellos devengan un sueldo maldito. Denuncias y comentarios: exalbja64@hotmail.com Cel. 962 10 80 934.
Amarillo. El origen del Programa IMSS-Oportunidades se inicio en 1973 con la modificación de la Ley del Seguro Social y se faculta al IMSS para extender su acción a núcleos de población sin capacidad contributiva, de extrema pobreza y profunda marginación.
En 1977, se crea Coplamar. En 1979, el IMSS integra sus servicios a Coplamar, por lo que surge el Programa IMSS-Coplamar. En 1989, se amplió IMSS-Coplamar y cambió su nombre por el de IMSS-Solidaridad. En 1995, Ernesto Zedillo, Presidente de México, encargo el diseño de un plan para atender la pobreza al economista Santiago Levy y el demógrafo José Gómez de León.
Ambos crearon lo que se ha considerado uno de los programas más exitosos para aliviar la pobreza. Levy es hoy director general del IMSS. Gómez de León, falleció en el año 2000. En 1997 se crea el Programa Nacional de Educación, Salud y Alimentación (PROGRESA). El 6 de marzo de 2002, se renombró al PROGRESA como Programa Desarrollo Humano Oportunidades (PDHO). Por lo que cambio de nombre por IMSS-Oportunidades, siendo el Modelo de Atención Integral a la Salud (MAIS) el pilar fundamental del programa. Rojo. Paradójicamente. Andrés Gerardo Espinoza, jefe de la Jurisdicción Sanitaria VII-Tapachula, con la complacencia de James Gómez Montes, Secretario de Salud en el estado, los dos dicen gozar de los favores del gobernador por lo que no les pueden hacer nada y por eso actúan arbitraria e inhumanamente como lo hicieron este sábado; utilizando el MAIS, como uno de los principales alimentos de los mexicanos y de los animales.
Por instrucciones de estos dos funcionarios, personal medico y de enfermería, obligaron bajo amenaza de ponerles “falta” a las beneficiadas con el “Programa Oportunidades” si no se presentaban a las 8 de la mañana en el Centro de Salud Urbano ubicado en la 8ª. Avenida norte y 19ª. Calle oriente, colonia 5 de febrero. Una inasistencia, para las madres solteras, con hijos pequeños y viviendo en una precaria economía; significa un descuento de la mitad de lo que reciben como apoyo. Algunas de las mujeres no asistieron a su trabajo. Llevaron a sus pequeños hijos, sin desayunar. Dos horas después llegaron los autobuses para trasladarlos al aeropuerto, lugar en que se llevaría acabo el banderazo del “Reforzamiento del Programa contra el Dengue en Tapachula”.
Varias cajas de refrescos y paquetes con botellas de agua, permanecían resguardadas por el personal de la jurisdicción, sin ser repartidas, esperando la orden del “patrocinador”, según respuesta de una de las personas que resguardaban los productos. Uno de los organizadores, Silvio González López, medico de profesión y con mucha “experiencia”, tema aparte, se pavoneaba de un lugar a otro mientras bebía y comía de los sándwiches, que eran para la gente que ellos obligaron a asistir. Para las 2 de la tarde, el calor, el hambre, la sed y el cansancio se apodero de los asistentes. Varios fueron atendidos de urgencia por médicos ahí presentes. Hasta entonces, los organizadores Andrés Gerardo Espinoza y James Gómez Montes, giraron instrucciones para que se empezaran a repartir el agua y los sándwiches, los cuales no alcanzaron a las más de 500 gentes.
La gente se desespero y al quererse retirar, se los impidieron, nuevamente amenazándolos con ponerles falta. Como cárceles de alta seguridad y una forma de amedrentar a la gente, pasaron lista de asistencia. Al finalizar el evento, 4 de la tarde, más de 100 personas tuvieron que pagar 15 pesos de su pasaje para Tapachula, por que los de la jurisdicción no se preocuparon por regresarlos, sin impórtales que fueran niños.
Reflexión. Los niños no tenían obligación de estar en dicho evento y menos pasar por toda esta odisea. ¿“Profesionales de la medicina” y encargados de un programa de salud? lo que menos les importa es la salud de quien gracias a ellos devengan un sueldo maldito. Denuncias y comentarios: exalbja64@hotmail.com Cel. 962 10 80 934.
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